HIMNO:
La pena que la tierra soportaba, a causa del pecado, se ha trocado en canto que brota jubiloso, en labios de María pronunciado.

El sí de las promesas ha llegado, la alianza se cumple, poderosa, el Verbo eterno de los cielos con nuestra débil carne se desposa.

Misterio que sólo la fe alcanza, María es nuevo templo de la gloria, rocío matinal, nube que pasa, luz nueva en presencia misteriosa.

A Dios sea la gloria eternamente, y al Hijo suyo amado, Jesucristo, que quiso nacer para nosotros y darnos su Espíritu divino.   Amén.

EVANGELIO según san Mateo 1, 18-24

El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: María, su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo.

José, su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió repudiarla en secreto. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo:

-«José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados.»

Todo esto sucedió para que se cumpliese lo que había dicho el Señor por el Profeta:

«Mirad: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Enmanuel, que significa “Dios-con-nosotros”.»

Cuando José se despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y se llevó a casa a su mujer.

Palabra de Dios

COMENTARIO breve: José se fía de Dios (el “sueño” es otra forma de revelación -como lo son las “audiciones” y las “visiones”- además de la palabra y los hechos), acepta su plan y acoge a María en su casa; los dos juntos hacen realidad el proyecto de Salvación pensado por el Padre y realizado por el Espíritu Santo. El que va a nacer se llamará Jesús=DIOS SALVA y Enmanuel= DIOS ESTÁ CON NOSOTROS. ¿Abrimos de par en par la puerta de nuestro corazón para acogerle, quererle y cuidarle?

Cuarto domingo de ADVIENTO